11 de junio de 2013

Sardinas a la Roteña

Una forma muy peculiar y fácil de preparar un buen plato de sardinas. Es una receta que sugiere varios nombres ya que en Málaga y Granada es conocido como Moraga de Sardinas, en otras zonas se le puede aplicar el nombre de Sardinas Morunas y yo siempre le llamo Sardinas a la Roteña ya que los ingredientes son muy  similares de la Urta a la Roteña.
Hace años hice esta receta y siempre que es la ocasión intento repetirla así que os cuento como lo hago adaptada a los comensales. 

Ingredientes ( 4 p):  
1 kg de Sardinas
4 tomates ( en esta ocasión tipo raf)
1/2 cabeza ajos
4-5 cebolletas
4 pimientos tipo italianos
100 cl de aceite aove
Sal
Pimienta negra
Oregano
Jugo de limón
Vino blanco

ELABORACION 
Picar el ajo, cebolla, pimiento y tomate.
Regar el fondo del sartén con el aove, calentar y hechar el ajo, cebolla, pimiento y tomate por ese orden, poner a fuego mediano y mover a menudo, añadir una pizca de sal.
A continuación si no has limpiado ya las sardinas, es hora asi que se limpian y se quita la totalidad de las espinas, dejando los filetes separados o juntos como te guste pero con la precaución de quitar la pequeña aleta que tiene en su lomo.Añadir jugo de limón al gusto.


Al estar listo el sofrito o  la base disponer  las sardinas sobre ella, de forma que se cubra totalmente la superficie. Añadir un buen chorro de vino blanco de forma que no cubra totalmente la superficie, añadir   otra pizca de sal y tapar, dejar a fuego medio.  Se vigilará la cocción para que no se pegue, así estará unos 7 minutos, destapar y si aún tiene mucho jugo dejar al descubierto 2-3 minutos más.  
Retirar del fuego y dejar reposar al menos 10 minutos más para que los sabores se mezclen bien. 



Valor nutritivo.
Kcal. 160 
La sardina es un pescado azul por lo que es muy buena fuente de omega-3, éstos ayudan a disminuir los niveles de colesterol y de triglicéridos, posee un alto contenido proteico.
Entre las vitaminas hidrosolubles encontramos B1 y B12, importantes para el metabolismo celular, ayuda a la formación de glóbulos rojos en la sangre y al mantenimiento del sistema nervioso central.
Contiene vitaminas liposolubles A o retinol, buena para la vista y la piel; D necesaria para absorber la vitamina C  y E con función antioxidante y ayuda al sistema inmunitario. 
En cuanto a los minerales, la sardina contiene fósforo, magnesio, potasio, hierro, zinc y yodo. 

El valor nutritivo se complementa con los tomates, pimiento y cebolla que aportan vitaminas del grupo B (B1, B2, B5), C, carotenos, alto contenido del flavonoide quercetina que es un  antioxidante de la familia del polifenol que protege nuestro organismos de enfermedades cardiovasculares y del cancer.


2 comentarios:

  1. Gracias por la receta. Llevo tiempo queriendo hacer sardinas.

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  2. Esta misma receta, si es para más comensales, se hace poniendo capas alternas de guarnición y sardinas siendo la última de éstas.

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